Antonio y Bea, son ellos… son esa pareja que todo fotógrafo quiere tener delante, y no solo porque sean un par de bellezones que flipas, si no porque por dentro son aún más bonitos que por fuera. Su complicidad es desproporcionada, nunca he tenido delante una pareja que se quisiera a ese nivel, esta claro que están hechos el uno para el otro…y eso, en las fotos, se nota.
Su preboda y su boda fueron en Burgos, ellos son arquitectos e hicimos cositas en la ciudad… pero la postboda nos dejaron elegir a nosotros y sin irnos demasiado lejos, pusimos rumbo al mar… queríamos sentir la brisa y escuchar las olas, así que acabamos en Cantabria, en los acantilados de Ajo y estas fotos son el resultado.
Esperamos que gusten.